Psicóloga Clínica | especialista en adicciones sin sustancia

En las adicciones una de las características principales es la incapacidad de poder frenar el consumo de una sustancia (hachis, cocaína, speed, alcohol, tabaco…) o la realización de una conducta adictiva (apuestas y juegos de azar, videojuegos, redes sociales y páginas de contacto, compras…) , a pesar de las consecuencias negativas que este consumo o conducta está generando en tu vida.

• ¿Cada vez invierto más tiempo y/o dinero en mi adicción?
• ¿Qué he perdido por priorizar mi consumo o conducta?
• ¿Miento a personas cercanas sobre el tiempo o cantidad de dinero invertidos en mi consumo/conducta?

Las emociones son reacciones naturales que tenemos los seres humanos en nuestra interacción con el entorno y con otras personas. Sin embargo, en ocasiones, las emociones son muy intensas y nos desbordan: no nos dejan dormir, no nos dejan disfrutar, ni estar en calma cuando necesitamos. Es necesario atender a estar alertas emocionales y aprender a gestionarlas.

• Educación y gestión emocional
• Pensamiento obsesivo
• Ansiedad o ataques de pánico
• Culpa y desesperanza
• Fobias
• Estrés

• ¿Experimentas estados emocionales intensos y variables que limitan tu vida cotidiana?
• ¿Experimentas sensaciones corporales que no puedes controlar y que te asustan?
• ¿Empleas mucho tiempo pensando en el futuro o en lo que ocurrió en el pasado?
• ¿Has dejado de lado las actividades o eventos que te hacían disfrutar?

La calidad de las relaciones que mantenemos en nuestra vida son pilares fundamentales pero también puede ser una fuente de gran preocupación y conflicto. La comunicación y la asertividad nos ayudan a que estas relaciones sean saludables y satisfactorias.

• Dificultad para comunicarse
• Dificultad para poner límites
• Conflictos familiares o de pareja
• Celos
• Dependencia relacional
• Fobia social
• Soledad

• ¿Te cuesta poder expresar las sensaciones y emociones que sientes a las personas de confianza de tu entorno?
• ¿Los conflictos familiares o de pareja se estancan y se alargan en el tiempo?
• ¿Los conflictos con las personas que quieres tratan de los mismos temas y se repiten una y otra vez?
• ¿La soledad o la interacción con otras personas te crea un malestar significativo y tratas de evitar dichas situaciones?

La vida es dinámica, inestable e incompleta. Constantemente tenemos que adaptarnos a los cambios que en ella acontecen: algunos son debido a diferentes etapas de la vida y otros se deben a circunstancias personales. Al intentar adaptarnos lidiamos con niveles de estrés que pueden afectarnos en nuestra vida diaria.

• Duelos o rupturas de pareja
• Cambios vitales (independizarse, paternidad, jubilación, divorcio, separación, crisis existencial…)
• Cambios en la vida personal (conflicto familiar, cambio de trabajo o residencia…)

• ¿Tu malestar está influyendo en las diferentes áreas de tu vida cotidiana (vida familiar, trabajo/estudios, vida social y personal…)?
• ¿Sientes niveles altos de ansiedad debido a un cambio acontecido en tu vida?
• ¿Tu estado de ánimo y energía son más bajos de lo habitual?